El Hospital de Mollet, alineado con su compromiso con el medioambiente y la reducción continua de su huella de carbono, ha instalado 1.368 placas fotovoltaicas, en la cubierta del centro, que proporcionan un ahorro de 120 toneladas de emisiones de CO2, una reducción de la demanda a red (y poder ser así un poco más autosuficientes) y un incremento de la protección solar del centro.
El Hospital de Mollet ha apostado desde su construcción por las energías renovables y la mejora continua de la gestión energética. Desde su apertura, en 2010, el hospital es un referente arquitectónico en el ámbito de la sostenibilidad medioambiental, gracias a su estructura de vidrio, patios de luces, recogida de agua, gestión de residuos y uno de los sistemas de geotermia más grandes de Europa.
Alineado con su compromiso con el medioambiente y la reducción continua de su huella de carbono, el Hospital de Mollet ha instalado 1.368 placas fotovoltaicas, en la cubierta del centro, que proporcionan un ahorro de 120 toneladas de emisiones de CO2 (equivalente a plantar 240 árboles cada año) y que proveerán al hospital del 12,5% de la energía que consume.
El sistema consiste en un mecanismo por el cual la producción se inyecta a la corriente del hospital para un consumo inmediato, de un 7% durante los meses de invierno y un 25% durante los meses de verano. En total, se contará con un suministro de más de 800.000 kilovatios por hora (que equivale al consumo de una media de 200 viviendas de 75 metros cuadrados), según ha informado el centro en un comunicado.
Además, la instalación de las placas también supone una protección solar de la cubierta del hospital.
Por lo tanto, con esta buena práctica se han conseguido 3 objetivos:
Si bien la instalación de placas solares, en sí mismo, no es especialmente innovador, este proyecto si lo es por los siguientes motivos:
El proyecto se ha divulgado en numerosos medios de comunicación, especialmente en prensa escrita:
Además:
Disminución de costes. Reducción del 12,5% del consumo eléctrico de la red, reducción de la potencia eléctrica contratada (entre 120-150 KW/hora) y ahorro estimado de 65.000 euros/año para la producción y de 10.200 euros/año por la reducción de la potencia contratada, por lo que en 7 años está previsto amortizar la inversión económica realizada de 450.000 euros.
Mayor notoriedad de marca. Reducción de 240 toneladas de emisiones de CO2 (si bien la Fundació Saniària Mollet utiliza el 100% de energía verde para su consumo, alguien la podrá aprovechar).
Crear un futuro sostenible. Reducir la demanda a red y ser autosuficientes.
2016
5 años
Más de 100.000 €
Chint ENERGY
A continuación se expone cómo se desarrolló la buena práctica:
Publicada el 14 sep. 2021
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